Las ventas de vehículos continúan a la baja en la Unión Europea. En junio descendieron un 2,8 por ciento con respecto al año anterior, en su noveno mes consecutivo de retroceso. El descenso toca especialmente a los países del sur europeo, en fuerte recesión. En España se vendieron un 12 por ciento menos de vehículos, en Italia el 24 menos y, en Grecia, el 41.
La dinámica desde principios de año refleja esta mala situación a nivel de toda la UE: en los meses anteriores, la bajada de ventas estuvo siempre entre el cinco y el diez por ciento. Desde enero, esto significa un 6,8 por ciento de retroceso.
A nivel de marcas, las únicas que se salvan de la dinámica negativa son la alemana Volkswagen y las asiáticas. Uno de los peores parados es el francés Peugeot-Citröen, que acaba de anunciar una reducción de plantilla de 8.000 trabajadores en su propio país. El grupo PSA vio como sus ventas caían en un ocho y medio por ciento en junio. Aunque el italiano Fiat perdió nada menos que el 18 por ciento. Y los estadounidenses General Motors, con Opel, y Ford bajaron en porcentajes similares. Unas cifras que hacen temer con nuevas reducciones drásticas de plantilla.