Decenas de miles de personas han acudido a la capilla ardiente instalada en el Museo Sájarov de Moscú para despedirse del líder opositor ruso
PUBLICIDADDecenas de miles de personas han acudido a la capilla ardiente instalada en el Museo Sájarov de Moscú para despedirse del líder opositor ruso, asesinado el viernes a escasos metros del Kremlin.
Durante cuatro horas, miles de moscovitas han esperado pacientemente para entrar en la capilla ardiente.
“En mi opinión esta muerte es una tragedia para todos nosotros porque era una de las personas más brillantes al frente de los movimientos contrarios a las políticas de Putin y eso es algo negativo”, se lamenta esta mujer. “Su muerte nos ha abierto los ojos, nos ha despertado y ha activado a aquellos que son capaces de pensar. Ha demostrado que no podemos aceptar todo lo que está pasando, que debemos luchar, organizarnos y cambiar todo esto”, destaca este moscovita.
Los restos mortales de Nemtsov han recibido sepultura en este cementerio al oeste de Moscú, en una ceremonia íntima a la que tan sólo han asistido familiares y otras personalidades, rusas y extranjeras.
Varios líderes de la oposición como Alexéi Navalni han denunciado que se les ha denegado el permiso para asistir al funeral. Otros como el excampeón mundial de ajedrez, Garry Kasparov, han decidido no acudir porque teme por su seguridad personal.