Los peores días del Yemen podrían estar aun por llegar. Egipto y Arabia Saudí, que lideran la coalición contra el movimiento chií de los hutíes, han
PUBLICIDADLos peores días del Yemen podrían estar aun por llegar. Egipto y Arabia Saudí, que lideran la coalición contra el movimiento chií de los hutíes, han anunciado maniobras militares en suelo del segundo país, lo que podría preceder a una intensificación de los ataques que comenzaron hace tres semanas.
Los bombardeos aéreos de ayer mataron al menos a 17 personas e impactaron contra un mercado de la provincia de Saada y varias gasolineras de la zona. Los rebeldes han criticado el embargo de armas a sus líderes impuesto el martes por la ONU.
“Por supuesto, una petición como esa no es lógica. Ahora hay agresiones en el Yemen. El Yemen se ha convertido en objetivo, tanto militar como civil, y también sus infraestructuras. Los enemigos del exterior vienen y demandan que entreguemos las armas. Evidentemente es algo que no va a ocurrir y que no podemos aceptar”, aseguraba Mohamed al-Bukhaiti, miembro del consejo político de los hutíes.
La crisis humanitaria, por otro lado, no deja de agudizarse. Unos 850.000 menores están malnutridos y cerca de 16 millones de personas de los 26 millones que viven en el país necesitan algún tipo de asistencia.