El accidente le costó la vida a los 118 hombres que formaban su tripulación. El 12 de agosto del año 2000, cuando el submarino nuclear participaba en
El accidente le costó la vida a los 118 hombres que formaban su tripulación.
El 12 de agosto del año 2000, cuando el submarino nuclear participaba en unos ejercicios navales, se produjo una explosión en el compartimento de torpedos que destruyó la proa y provocó el hundimiento del buque.
“Creo que no hay duda de que hace quince años, no se hizo todo lo posible para rescatar a la tripulación.
El único buque de rescate, el Mikhail Rudnitsky, estaba en el muelle y ni siquiera se estaba preparando para ir al mar a pesar de que la Flota del Norte estaba disponible.
Lo más importante es el objetivo y no rechazar la ayuda extranjera como lo hicimos durante mucho tiempo”.
Como este portavoz de los oficiales, muchos otros familiares no se dan por satisfechos con las explicaciones oficiales sobre la tragedia.
Más tarde se supo que la cúpula militar ocultó la magnitud de la catástrofe y rechazó la ayuda de otros países para rescatar a la veintena de tripulantes que no murieron a causa de la explosión.
El “Kursk” fue localizado cuando aún era posible salvar a 23 marinos, pero el Kremlin no dio el visto bueno para la operación internacional de rescate hasta una semana después.