Uniforme rosa, logotipo rosa y hasta esmalte de uñas rosa…son los signos distintivos del primer servicio de taxi exclusivamente femenino en Egipto
PUBLICIDADUniforme rosa, logotipo rosa y hasta esmalte de uñas rosa…son los signos distintivos del primer servicio de taxi exclusivamente femenino en Egipto.
El proyecto, fundado según su directora para proporcionar un medio de transporte seguro a las mujeres en un país con altos índices de acoso sexual, funciona ya con éxito en ciudades como Londres o París.
Reem Fawzy, directora de Taxi Rosa:
“Como todas las ideas nuevas, se inspira en las necesidades de la sociedad, y en Egipto necesitamos un servicio de transporte seguro para las mujeres. Y no solo para las egipcias, también las extranjeras y las árabes, para las mujeres en general”.
Las agresiones sexuales en espacios públicos se han multiplicado en los últimos años, especialmente durante las manifestaciones celebradas en la plaza Tahrir de El Cairo. Sólo un número muy reducido de hombres han sido encarcelados por estas agresiones.
En un reciente estudio de ONU Mujeres y del Ministerio de Salud egipcio, el 99% de las mujeres encuestadas dijeron haber sufrido acoso sexual, y el 47%, alguna forma de violencia en el ámbito familiar.
Voces críticas subrayan que la creación de compañías como Pink Taxi son soluciones cosméticas y que sin cambios en la ley el acoso seguirá, pero para esta taxista es al menos una mejora de la vida cotidiana para las mujeres.
Mervat al-Badry, conductora en Taxi Rosa:
“La pasajera no está ansiosa, como con un hombre, y si se tiene que desplazar por la noche, el hecho de que la lleve una mujer le da cierta confianza”.
Kareema Sakoot, clienta:
“Es una idea muy innovadora, me gusta mucho. Las mujeres han decidido protegerse. Por supuesto, la sociedad egipcia rechaza siempre las ideas nuevas y no comprende este tipo de iniciativas, pero estoy segura de que acabará acostumbrándose y Taxi Rosa será un éxito”.
Las autoridades egipcias han anunciado una serie de iniciativas simbólicas para erradicar la violencia contra las mujeres, como la adopción de una ley que criminaliza el acoso sexual, pero sigue sin haber estrategias integrales y continuadas.