El gobierno alemán exige que Volkswagen llame a reparar 2.400.000 vehículos con motores diésel trucados. La Autoridad Federal de Transportes (KBA)
El gobierno alemán exige que Volkswagen llame a reparar 2.400.000 vehículos con motores diésel trucados. La Autoridad Federal de Transportes (KBA), entidad ministerial, controlará además este proceso dada la envergadura del escándalo iniciado en Estados Unidos por el engaño en las pruebas de gases contaminantes.
“La Autoridad Federal de Transportes cree que este será un caso de programa informático que usa un dispositivo ilegal para engañar”, manifestó el ministro, Alexander Dobrindt. “Ahora, Volkswagen debe cambiar este programa en todos los vehículos y dar los necesarios pasos para cumplir con las regulaciones de emisiones”.
El regulador federal espera que, de aquí a finales de octubre, se dé una solución técnica para los motores diésel de dos litros y, de aquí a finales de noviembre, para los de 1,2 y 1,6 litros. La reparación de los primeros parece más sencilla con una sola manipulación informática. Las primeras llamadas se harán en enero próximo y las reparaciones se prolongarán durante todo 2016.
Por su parte, la dirección de Volkswagen anunció que llamará a reparar hasta ocho millones y medio de vehículos en toda Europa. Simultáneamente, la fiscalía de Italia ordenó registrar la sede de Volkswagen en el paísuiop, en Verona, y de su filial Lamborghini, en Bolonia.