Centenares de activistas israelíes y palestinos desfilaron juntos en una marcha por la paz en Jerusalén. Coreando eslóganes como “Judíos y árabes se
Centenares de activistas israelíes y palestinos desfilaron juntos en una marcha por la paz en Jerusalén. Coreando eslóganes como “Judíos y árabes se niegan a ser enemigos”, lanzaron un mensaje de unidad y esperanza en un momento de máxima tensión, que hay quien califica ya como el inicio de una tercera Intifada.
“Hemos venido aquí para mostrar que judíos y árabes, israelíes y palestinos pueden permanecer unidos y avanzar hacia una política diferente, una política de una paz justa, de independencia para nuestros pueblos, en lugar de intensificar la ocupación, que es lo que el Gobierno de Netanyahu está intentando hacer, en lugar de ampliar los asentamientos”, declaraba Uri Weltmann, activista israelí y profesor de Haifa.
Este llamamiento a la unidad, la paz y la convivencia entre palestinos e israelíes no es compartido por todo el mundo. Un israelí tachó a los judíos de “ingenuos”. “Así es como llegamos a Auschwitz, por ser ingenuos”, dijo.