La diplomacia internacional se moviliza para intentar frenar la crisis de Oriente Próximo. El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon ha
PUBLICIDADLa diplomacia internacional se moviliza para intentar frenar la crisis de Oriente Próximo. El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon ha enviado un mensaje esta mañana a sus interlocutores en la región antes de desplazarse a Jerusalén, donde hoy debería entrevistarse con Benjamin Netanyahu.
“Naciones Unidas está con vosotros”, decía. “Seguiremos intentando ayudaros a crear las condiciones necesarias para entablar una negociación sincera. Y dejadme ser claro. La violencia sólo minará la legitimidad de las aspiraciones para crear un Estado palestino y socavará el anhelo de seguridad para el pueblo israelí”.
Pero acercar posiciones no será fácil, ya que ambos bandos descargan la responsabilidad en la otra parte. Estas eran las declaraciones del jefe del gobierno israelí:
“Mahmud Abás dijo el otro día que daba la bienvenida al derramamiento de sangre en Jerusalén”, aseguraba Netanyahu. “¿Es ese un discurso moderado? ¿Quién glorifica estos actos? Que yo sepa, hasta ahora no ha condenado ni uno sólo de ataques terroristas perpetrados en el último mes”.
Abás achaca la oleada de violencia a “la desesperación del pueblo palestino ante los actos de ocupación israelíes”. El líder de la ANP se reunirá con Ban Ki-moon el miércoles en Ramallah. Y a finales de mes, pronunciará un discurso con motivo de la reunión especial del Consejo de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, en Ginebra.