En Turquía, el partido de Recep Tayyip Erdogan se ha tomado la revancha y contra todo pronóstico ha recuperado la mayoría absoluta perdida en junio
PUBLICIDADEn Turquía, el partido de Recep Tayyip Erdogan se ha tomado la revancha y contra todo pronóstico ha recuperado la mayoría absoluta perdida en junio.
“La voluntad del pueblo ha expresado que no hay otra opción que la estabilidad. Espero que sea lo mejor para nuestro país. Por supuesto que pido a mi pueblo unidad, seamos hermanos y hermanas, seamos Turquía todos juntos”.
El Partido de la Justicia y el Desarrollo ha logrado cerca del 50% de los votos, 316 escaños de los 550 del Parlamento turco. El partido socialdemócrata CHP, principal formación de oposición, ha avanzado medio punto, hasta el 25,4%, y ganado dos escaños. El ultranacionalista MHP ha sido el gran perdedor, al descender más de cuatro puntos. También ha sufrido un retroceso importante el prokurdo HDP, del 13,1 al 10,6%.
“Creo que es algo bueno para Turquía. Un Gobierno de un solo partido siempre tiene un efecto positivo en los mercados y la economía, pero, por supuesto, algunas personas pueden estar decepcionados por el hecho de que no suela haber gobiernos de coalición en Turquía”, dice un vecino de Ankara, votante del islamista AKP.
“Yo no culpo al AKP. También nosotros merecíamos la victoria, pero no la hemos logrado. Lo siento de verdad. Ya no hay movimientos de izquierda en Turquía”, señala una vecina de Ankara, votante del socialdemócrata CHP.
En una tensa campaña marcada por la reanudación del conflicto kurdo y por el terrorismo yihadista, el islamista Partido de la Justicia y el Desarrollo se ha presentado como el único garante de la unidad y la seguridad del país, bajo el lema “el AKP o el caos”.
La participación fue del 85,8%, algo superior a la de los comicios de junio.