Ya ha pasado una semana desde del derribo de un avión ruso por el Ejército turco en Siria. El presidente estadounidense ha pedido moderación a ambos
Ya ha pasado una semana desde del derribo de un avión ruso por el Ejército turco en Siria. El presidente estadounidense ha pedido moderación a ambos países aunque, también, ha reiterado el derecho a la autodefensa de Turquía, miembro de la OTAN.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha reconocido que este conflicto está dañando a ambas partes y aumentado tensión en la región.
El sector turístico y las importaciones de productos agroalimentarios están en primera línea de fuego. Las autoridades rusas no han esperado la anunciada suspensión del sistema de visado entre ambos países, a partir de 2016, para multiplicar las expulsiones de trabajadores, hombres de negocios y estudiantes turcos.
Putin, también, ha advertido de la posible congelación de proyectos con Turquía aunque los expertos aseguran que las sanciones no afectarán al sector energético de lleno.
Mientras tanto, la embajada y consulados turcos en Rusia siguen siendo escenario de protestas, como este martes en Moscú, donde seguidores del partido Comunista han organizado una manifestación con lanzamiento de huevos y tomates.