Sonita Alizadeh es afgana, rapera y tiene 19 años. Cuando era pequeña su familia quiso venderla para casarla. En 2014, decidió publicar el videoclip
PUBLICIDADSonita Alizadeh es afgana, rapera y tiene 19 años. Cuando era pequeña su familia quiso venderla para casarla.
En 2014, decidió publicar el videoclip de uno de sus temas, “Novias en venta”, para denunciar lo que le ocurrió a ella.
Su historia está recogida en el documental “Sonita” de la directora iraní Rokhsareh Ghaem Maghami. Maghami obtuvo recientemente el premio del público en el Festival Internacional de Documentales de Amsterdam.
“Mi madre quiso casarme pero eso no quiere decir que no me quiera, explica Sonita. Me quiere pero tenía que cerrar los ojos, no podía hacer nada. Ella también estaba obligada a hacerlo por respeto a la tradición y debido a nuestra pobreza. Más tarde, gracias a mis canciones, mi madre se dió cuenta de lo que yo realmente sentía. Soy una chica pero puedo hacer cosas, puedo vivir mi propio futuro”.
Al principio la directora iraní pretendía apenas contar la historia de una joven afgana convertida en la primera rapera del país. Para ello intentó realizar un primer video.
Pero no fue fácil y al final entregó a la madre de Sonita dos mil dólares para salvar a la joven de un matrimonio forzado.
“Lo más difícil fue tratar con la madre porque quería llevarse a su hija. Fue un momento difícil porque si ayudas, te olvidas de la película y, si no ayudas, te olvidas del lado humano de esta historia. No podía quedarme de brazos cruzados”, afirma la directora iraní.
Sonita Alizadeh vive hoy en Estados Unidos y estudia música en la universidad. Tanto en su país como el resto del mundo la joven se ha convertido en un modelo para las chicas de su edad.