Las nuevas normas, ya en vigor esta semana, exigen que para cambiar de doscientos euros en adelante haya que cumpolimentar un detallado cuestionario
Las nuevas normas, ya en vigor esta semana, exigen que para cambiar de doscientos euros en adelante haya que cumpolimentar un detallado cuestionario. Los rusos que quieran comprar dólares o euros tendrán que responder preguntas sobre su situación financiera y fuentes de ingreso.
Para el Banco Central de Rusia estas nuevas limitaciones y normas en el control de cambios son una herramienta de lucha contra el blanqueo de dinero y la financiación del terrorismo.
El presidente ruso Vladimir Putin apuntaba la semana pasada que “la economía rusa ha superado el peor momento de la crisis”. El que fuera ministro de Finanzas ruso durante once años Alexéi Kudrin, advirtió sin embargo que la economía de Rusia aún no ha tocado fondo y que lo peor de la crisis puede estar por llegar.
Las perspectivas económicas de los rusos son malas, la brusca caída del petróleo empeora la situación y empuja hacia abajo la economia rusa. La poco halagüeña previsión para el año de la economía rusa incluye altos tipos de interés, riesgos para el empleo y sectores enteros de producción, nueva ola de morosidad crediticia y riesgos para la varias entidades bancarias.