Entre 44 y 50 camiones con más de 300 toneladas de comida y medicinas entraron el lunes en la localidad siria asediada por el régimen y milicianos de Hizbulá. La población está muriéndose de hambre, s
PUBLICIDADEntre 44 y 50 camiones con más de 300 toneladas de comida y medicinas entraron el lunes en la localidad siria asediada por el régimen y milicianos de Hizbulá. La población está muriéndose de hambre, sometida a un implacable cerco militar desde hace más de tres meses. El Gobierno ha permitido a algunas familias abandonar el enclave controlado por grupos opositores.
“ Ahrar Al Sham y el Frente al Nusra tenían comida pero no la compartían con nadie. Mientras nosotros lo único que podíamos comer era la hierba”
Estados Unidos acusa al régimen de Al Asad de utilizar el hambre para ganar batallas en una guerra civil que entra en su quinto año con más de 200.000 muertos.
Samantha Power, embajadora de EEUU en la ONU:
“ En Siria hay cientos de miles de personas víctimas de asedios, a las que se está desnutriendo deliberadamente. Estas imágenes, que nos recuerdan a la Segunda Guerra Mundial, sacuden nuestra conciencia”
El embajador sirio en la ONU contaba la misma historia de otra manera:
Bashar Ja’afari, embajador de Siria en la ONU:
“ La información sobre la situación en Madaya no es correcta. El Gobierno sirio no ha parado ningún convoy de asistencia humanitaria, al contrario. Nosotros mismos hemos mandado muchos cargamentos y le pedimos a la ONU que enviara más. Pero lo que ocurre con estos terroristas- sí, terroristas, porque no son ángeles ¿sabe?- es que confiscan la ayuda y la utilizan en detrimento de la población civil”
La entrada de víveres en Madaya ha sido posible gracias a un pacto que autoriza el suministro de ayuda a otras dos localidades de mayoría chií- Al Fua y Kefraya- sitiadas estas por grupos opositores con métodos similares a los del régimen.