Cultivos de tejido óseo a partir de células madre

Cultivos de tejido óseo a partir de células madre
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Por Escarlata Sanchez
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“A cualquier edad puede surgir una deterioración de los huesos que requiere complejas operaciones de trasplante de tejido óseo. Una terapia que

“A cualquier edad puede surgir una deterioración de los huesos que requiere complejas operaciones de trasplante de tejido óseo. Una terapia que podría simplificarse si los médicos pudieran regenerar los tejidos óseos del propio paciente.”

El profesor Michael Rasse dirige esta clínica de cirugía maxilofacial que reconstruye huesos faciales deteriorados bien por el cáncer o por accidentes graves. Este paciente, por ejemplo, ha sido operado tres veces de un tumor en los últimos diez años. Su mandíbula superior fue reconstruída a partir de trozos de huesos sanos tomados de diversas partes de su cuerpo.

“Para este tipo de cirugía ustedes necesitan utilizar los huesos del propio paciente, pero eso no es lo ideal, supongo.”

“No es lo ideal, porque el hueso que se ha extraído ya no vuelve a regenerarse, explica Michael Rasse, de la Universidad Médica de Innsbruck. Se produce pérdida de la función muscular, pérdida de sensibilidad y el tratamiento quirúrgico es bastante largo”.

El organismo del paciente puede rechazar los implantes sintéticos o los tejidos de otros donantes. El proyecto europeo de investigación Vascubone trabaja en un tratamiento con el que superar estos inconvenientes.

¿En qué se diferencia este método de los que se han utilizado hasta hoy en día?”

Oliver Pullig, es investigador en Biotecnología, Fraunhofer Translational Centre Würzburg.

“La gran diferencia de este método es que al usar las propias células del cuerpo, no se produce una reacción inmune de rechazo a agentes externos, sino que el organismo las acepta sin problema.”

En este laboratorio realizan cultivos de tejidos y células óseas. Lo primero que hacen es eliminar todas las células de origen porcino del intestino del cerdo. En esta estructura de colágeno se conservan intactos los vasos sanguíneos, que se rellenan con un material de sustitución ósea y con las células madre del paciente.

Christoph Rücker realiza su trabajo de investigación en el Fraunhofer Translational Centre Würzburg.

“El intestino del cerdo resulta adecuado por varias razones: en primer lugar, porque el proceso de descelularización está muy bien establecido, y en segundo lugar, su tamaño es idóneo para los implantes de unos pocos centímetros. Estos gránulos de beta tri Fosfato de Calcio (β TCP) constituyen un material similar al del hueso, llamado material de sustitución ósea, que se implanta con células madre que obtenemos de la médula ósea del paciente.”

La preparación del trasplante se finaliza en la incubadora, que proporciona las condiciones necesarias para que el tejido óseo se desarrolle. Los investigadores han puesto a punto diversas técnicas y materiales para tratar problemas óseos que pueden presentarse a diferentes edades.

“Hemos llevado a cabo un estudio experimental y esperamos iniciar con éxito los ensayos clínicos a finales de año, prosigue Christoph Rücker. Si funciona, este método podría tener un uso clínico en el futuro.”

Y también con vistas al mañana, esta empresa trabaja en un método para producir implantes óseos utilizando impresoras 3D.

Doris Steinmüller-Nethl, es Física en la empresa DiaCoating

“En el futuro, los cirujanos utilizarán impresoras 3D en sus clínicas para producir implantes en el momento mismo en que llega el paciente. El modelo se obtiene mediante resonancia magnética, por lo que cada paciente recibirá un implante personalizado.”

Los investigadores de este “proyecto”:
http://www.vascubone.fraunhofer.eu/trabajan en la combinación de cerámica y polímeros con nanopartículas de diamante para imprimir sustitutos óseos biocompatibles.

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