El australiano Michael Matthews se adjudicó la segunda etapa de la París-Niza en un polémico final de carrera. El perfil llano del recorrido, de 214
El australiano Michael Matthews se adjudicó la segunda etapa de la París-Niza en un polémico final de carrera.
El perfil llano del recorrido, de 214 kilómetros entre las localidades de Contres y Commentry, hacía de este segundo día una etapa perfecta para los velocistas.
La gran escapada del día, de más de 200 kilómetros tuvo lugar desde el kilómetro 0. A 12 de la meta, los expertos en el esprint empezaron a mostrar sus armas para alzarse con el triunfo.
Entre ellos Matthews y Nacer Bouhanni. El francés, que cruzó primero la linea de meta fue relegado al tercer puesto por este codazo en los metros finales a Matthews, vencedor final.
De esta manera el australiano matiene el maillot de líder con 14 segundos de margen sobre el segundo, el holandés del Giant Tom Doumoulin.