El Dáesh ha bañado en sangre una ceremonia de entrega de trofeos tras un partido fútbol en Irak .Al menos 30 personas murieron ayer y más de 70
PUBLICIDADEl Dáesh ha bañado en sangre una ceremonia de entrega de trofeos tras un partido fútbol en Irak .Al menos 30 personas murieron ayer y más de 70 resultaron heridas en un atentado suicida perpetrado por un militante del grupo Estado Islámico en Alejandría, una localidad situada a unos 45 km al sur de Bagdad. El kamikaze hizo estallar la carga que portaba consigo tras mezclarse entre los asistentes al espectáculo deportivo. Entre las víctimas mortales se encuentra el alcalde de esta localidad en la que habitan tanto chiíes como suníes.
El atentado tiene como telón de fondo la operación lanzada por el Ejército iraquí para liberar la provincia de Nínive, donde se encuentra Mosul, el principal bastión del Dáesh en Irak. Los militares iraquíes avanzan con lentitud en la zona controlada por los yihadistas debido los ataque suicidas y a la gran cantidad de trampas de explosivos que dejan en su huida.