"Visita o Memorias y Confesiones" llega a los cines después de la muerte de su director, Manoel de Oliveira
A los 73 años, Manoel de Oliveira realizó una película que debía ser mostrada al público después de su muerte.
El realizador portugués murió el año pasado, a los 106 años, así que ahora es possible ver “Visita o Memorias y Confesiones”, una película íntima y conmovedora.
Por razones financieras, en 1982 Manoel de Oliveira se vió obligado a vender la casa en la que vivió desde los años cuarenta. Es un momento doloroso que sirve como punto de partida para una reflexión sobre de la vida, la muerte, la familia y el cine.
Es fascinante ver que, en el momento en que realizó el filme, Manoel de Oliveira estaba aún lejos del final de su vida. En aquella época estaba a punto de comenzar el periodo más rico de su carrera. Hasta 1982, ya había hecho quince películas. En total, dejó un legado de más de sesenta obras.
La película es también un testimonio de la historia de Portugal, los períodos de la dictadura y la revolución.
“Visita o Memorias y Confesiones” es una película sencilla que mezcla naturalismo y fantasía. Es un encuentro con la juventud Manoel de Oliveira a sus 73 años.