El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el presidente palestino, Mahmud Abás, serán los grandes ausentes en este encuentro al que sí asisten una treintena de países árabes y…
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el presidente palestino, Mahmud Abás, serán los grandes ausentes en este encuentro al que sí asisten una treintena de países árabes y occidentales.
Una conferencia abocada al fracaso, según el Gobierno israelí que apuesta por la iniciativa árabe de paz de 2002, relanzada recientemente por el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi.
“Esta región ha cambiado mucho en los últimos años y la iniciativa árabe de paz es una nueva oportunidad que puede convencer a los palestinos para que las conversaciones sean directas y bilaterales. Desgraciadamente la iniciativa francesa proporciona un marco multilateral que los palestinos ven como una solución impuesta por Israel y un pretexto para no tomar decisiones difíciles”, señala David Keyes, portavoz del primer ministro israelí.
Sin embargo, para la Autoridad Nacional Palestina la implicación internacional es la solución para acabar con décadas de negociaciones estériles. “Hasta ahora Israel ha rechazado esta iniciativa y Francia piensa, y tiene razón, que reuniendo a todos estos países se podrán establecer principios que puedan crear un mecanismo para poder trabajar. Entonces palestinos e israelíes podrán hablar”, asegura el ministro de Exteriores palestino, Riad Al- Malki.
La iniciativa francesa se gestó el pasado año tras los intentos fallidos del presidente palestino, Mahmud Abás, de internacionalizar el conflicto mediante una intervención del Consejo de Seguridad de la ONU en 2014.