El atentado con camión bomba en Bagdad ha sido el más letal en la capital iraquí desde 2009 y uno de los peores desde la invasión estadounidense en 2003.
PUBLICIDADEl atentado con camión bomba en Bagdad ha sido el más letal en la capital iraquí desde 2009 y uno de los peores desde la invasión estadounidense en 2003. Tan solo un día antes tuvo lugar otro en un restaurante de la capital de Bangladesh, Daca.
Dáesh se ha atribuido la autoría de ambos, al igual que la del tiroteo en un club gay en Orlando y el ataque a un policía y a su esposa en Francia hace tres semanas.
El portavoz de la organización terrorista había anunciado en mayo un endurecimiento de su estrategia con más ataques yihadistas en Occidente, sobre todo durante el Ramadán. Una estrategia que escondería otra.
General Kadim Shahban, Director General de Protección Civil:
‘‘Daesh ha vuelto a cometer otro crimen contra personas inocentes en Karada (Bagdad). Y lo ha hecho después de haber sufrido importantes pérdidas en hombres y equipamientos en el campo de batalla.’‘
Desde que la coalición multinacional inició la campaña aérea contra posiciones de Dáesh en Irak y en Siria, la organización yihadista ha perdido el 40% del territorio que llegó a controlar en Irak y entre el 10 y el 20% en Siria. El principal varapalo para Dáesh fue la pérdida de la estratégica ciudad de Faluya.
Teniente general Hamid al-Maliki, Air Force Commander:
“Avistamos un convoy de Dáesh que se retiraba de una zona cerca de Faluya. La mayoría eran combatientes extranjeros que se negaron a rendirse a nuestras tropas “.
Pero la situación de Dáesh se debilita también desde el punto de vista económico. Las pérdidas territoriales han reducido sus ingresos mensuales en casi un 30% con respecto al año pasado, debido a que la organización obtiene la mitad de sus ingresos de la recaudación de impuestos. Además, los principales campos petroleros en manos de los yihadistas han sido blanco de ataques aéreos ya que la venta de crudo les proporciona cerca del 43% de sus ingresos.
Con semejantes pérdidas territoriales y de efectivos, Daesh vuelve muy a su pesar al estatuto de autoproclamado Califato, como antes Septembre 2014. Pero atribuyéndose la responsabilidad de los ataques terroristas en las redes sociales, sigue existiendo.