Yannick Nézet-Séguin pone el broche de oro a su paso por la Musekverein

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Por Euronews
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La novena de Bruckner, obra maestra inacabada del genial compositor austríaco resuena una vez más en la Musikverein de Viena.

La novena de Bruckner, obra maestra inacabada del genial compositor austríaco resuena una vez más en la Musikverein de Viena. Una prestación inigualable de la Orquesta Filarmónica bajo la batura del franco-canadiense Yannick Nézet-Séguin, uno de los directores más talentosos de su generación que se disputan las salas más prestigiosas del mundo.

Yannick Nézet-Séguin:

“Para mi, dirigir esta obra, al mando de esta orquesta, en esta sala, es, quizás, el mayor sueño de mi vida. He intentado no pensar en ello durante toda la semana para reducir el estrés, insoportable, aunque puedo decir que he cumplido mi sueño.”

“Bruckner buscaba rendir homenaje a los mejores compositores, ya sea Beethoven o Wagner. Se las ingeniaba para interpretarles de una manera que saliera, completamente, de lo ya escuchado en la historia de la música. Eso es, precisamente, lo que hace que la música de Bruckner sea tan bella: su aspecto intemporal, nunca visto, fuera de lo común. Todo ello le hace casi inaccesible pero, al mismo tiempo, refuerza su carácter único, especial.”

“La instrospección es el camino natural, obligatorio, de un artista a largo plazo que, como yo, ha tenido la oportunidad de dedicarse a la música desde los cinco años. Dispongo, además, de una energía física que me permite realizar muchos proyectos, implicarme física e intelectualmente en cada uno de ellos a fondo, aunque eso no me impide hacer un trabajo de introspección, hallar la fórmula: ¿cómo transmitir el verdadero mensaje que encierra cada obra y que deseo ofrecer a la gente? Así que no debemos dejarnos influenciar demasiado por el ruido ensordecedor que nos rodea.”

“Es mi misión como músico, todos tenemos un papel: ofrecer belleza al mundo. Como director de orquesta ese deber es aún mayor pues debemos aportar belleza y felicidad a la gente, es la razón misma de nuestro arte. Y cuando digo belleza y felicidad no quiero decir necesariamente alegría, diversión, fiesta, sino felicidad con mayúsculas inherente a lo que hacemos.”

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