Cambian los primeros ministros, cambian los gobiernos, pero él no se moverá de ahí.
PUBLICIDADCambian los primeros ministros, cambian los gobiernos, pero él no se moverá de ahí. El 10 de Downing Street seguirá siendo su residencia oficial.
Larry se ha convertido en el gato más famoso del Reino Unido. Fue adoptado hace cinco años para alejar a los ratones y ratas de la residencia gubernamental y, desde entonces, se ha ganado el cariño de ilustres visitantes e incluso de la prensa británica.
First sign of movement at No.10 – the door opens to let Larry the cat out. The press pack briefly frenzied. #brexitpic.twitter.com/qVUBVgeccu
— Reuters UK Politics (@ReutersLobby) 24 de junio de 2016
Larry tiene hasta su propia cuenta de Twitter y ha sido uno de los protagonistas de la última sesión de Cameron, este miércoles, en la Cámara de los Comunes.
“Hay un rumor de que no quiero a Larry, yo le quiero. Y tengo una prueba que lo demuestra”, decía el ya exprimer ministro británico.
Proof… pic.twitter.com/UZVXn6WcUw
— David Cameron (@David_Cameron) 13 de julio de 2016
“Es una pena que no pueda llevarme a Larry conmigo. Él pertenece a la casa y el personal le quiere mucho, tanto como yo”, dijo en su intervención.
People seem to be making quite a big fuss about me replacing my butler…
— Larry the Cat (@Number10cat) 13 de julio de 2016
Not sure who Theresa May thinks she is, but she's walking around Number 10 like she owns the place. Oh.
— Larry the Cat (@Number10cat) 13 de julio de 2016