Con 62 votos a favor y 45 en contra, el Parlamento israelí aprobó una ley que permite a los representantes electos suspender a legisladores por varios motivos, entre ellos, “incitación, racismo o apoy
PUBLICIDADCon 62 votos a favor y 45 en contra, el Parlamento israelí aprobó una ley que permite a los representantes electos suspender a legisladores por varios motivos, entre ellos, “incitación, racismo o apoyo de la lucha armada contra Israel.”
Los miembros de la Cámara podrán ser expulsados, durante toda la legislatura, con la aprobación de 90 de los 120 miembros del Parlamento. Una controvertida ley que, según sus críticos, está dirigida contra los legisladores árabes.
Ayman Odeh, legislador árabe:
“La estrategia del primer ministro es atacar a la minoría árabe. Por esta razón elevó el umbral electoral, él está contra nosotros todo el tiempo, por eso aprobó la nueva ley de expulsión. Él tiene miedo de nuestro impacto, representamos el 20 por ciento de la población y si nos volvemos más fuertes, Netanyahu dejará de ser el primer ministro y la derecha no gobernará más al país”.
Ze’ev Elkin, ministro de Exteriores:
“Ha sido aprobada una ley, que existe también en otros países, para permitir al Parlamento israelí decir que “así debe ser”, bajo un amplio consenso. Hay miembros de la Cámara que apoyan abiertamente el terror. Esto es imposible, va contra las obligaciones que asumieron en las elecciones. Los israelíes y el sistema político no están dispuestos a aceptar esto.”
Según el Instituto de Democracia de Israel, la nueva ley “daña la división de poderes, la libertad de expresión y la relación del Estado de Israel con su minoría árabe” además de la imagen del país como sociedad libre y democrática.