Por segunda vez en 48 horas, Mariano Rajoy fracasó este viernes en su segundo intento de ser investido presidente en el Parlamento español.
PUBLICIDADPor segunda vez en 48 horas, Mariano Rajoy fracasó este viernes en su segundo intento de ser investido presidente en el Parlamento español. En funciones desde hace ocho meses necesitaba 11 abstenciones, pero los 180 diputados que votaron en contra el miércoles, entre ellos los socialistas y Podemos, repitieron su voto.
Rajoy obtuvo 170 votos a favor, los de su propio partido, el PP (137), los de los centristas de Ciudadanos (32 diputados), y uno de Coalición Canaria , insuficientes para formar Gobierno. El bloqueo persiste, y los españoles han votado ya dos veces desde diciembre.
El politólogo Fernando Vallespín analiza para euronews esta compleja situación política, sin precedentes en España. En lo inmediato, esto es lo que contempla la Constitución:
Fernando Vallespín, politólogo:
“Ahora se abre una nueva fase que puede durar como máximo dos meses para que las fuerzas políticas traten de llegar a un acuerdo distinto de aquel que presentó Rajoy. Por tanto, tanto el líder de la oposición de facto, que es Pedro Sánchez o los socialistas, como otros grupos, pueden ponerse en marcha para facilitar que otro candidato se presente a la investidura. O bien el propio Rajoy, siempre y cuando, yo creo, esté seguro de que puede conseguirla.”
Pero probablemente, nada se moverá antes del 25 de septiembre, fecha de las elecciones autonómicas en Galicia y en el País Vasco. Sus resultados pueden fortalecer o debilitar a los conservadores.
Fernando Vallespín:
“Las elecciones en el Pais Vasco y en Galicia que en cierto modo, yo creo, que van a impedir que los partidos y los grupos políticos traten de ponerse de acuerdo hasta tanto no acaben, porque entramos en campaña electoral en esos lugares. Y son dos regiones muy sensibles porque en una de ellas, en Galicia, el PP es dominante, y en el País Vasco, pues tiene una enorme presencia Podemos y por supuesto tambien los nacionalistas.”
En el poder desde 2011 tras ganar las elecciones en diciembre y junio, Mariano Rajoy insiste en que tiene derecho a gobernar, y su partido se dice unido detrás de su candidato. ¿Por qué no consigue recabar suficientes apoyos entre los demás partidos?
Fernando Vallespín:
“El PP es el único partido del sistema político español que no se ha renovado desde la crisis política en España, crisis política insisto, que es producto de la crisis económica. Y en ese sentido Rajoy está señalado. Sobre Rajoy como máximo responsable de un partido que está ahora mismo en gran cantidad de juzgados siendo investigado por tramas de corrupción, evidentemente no facilita digamos la generación de pactos con ellos.”
La irrupción en el Parlamento español de dos nuevos partidos, a izquierda Podemos y al centro Ciudadanos, acabó con las mayorías absolutas, pero los dos grandes partidos, PP y PSOE, siguen liderando aunque debilitados. ¿Cómo salir del atolladero?
Fernando Vallespín:
“Lo único que es capaz de desbloquear el apoyo al Partido Popular es la figura de Rajoy, el PP no va a prescindir de Rajoy como candidato a la presidencia del Gobierno, eso no me cabe a mí la más mínima duda. Por tanto por ese lado no hay posibilidad de conseguir la investidura. Y el PSOE aunque quisiera hacer algo conjuntamente con Podemos, que parece que Podemos se prestaría, se queda lejos de tener los números necesarios para tener una mayoría suficiente. Osea es una situación de bloqueo perfecto.”
Para evitar este tipo de bloqueo, algunos países como Francia tienen un sistema de dos vueltas, en otros, como Grecia o Italia, el ganador tiene una prima de escaños. ¿Se podría concebir algo así en España?
Fernando Vallespín:
“La reforma del sistema electoral en España va por otra vía, digamos que la mayoría de las fuerzas políticas están a favor de una reforma que favorezca todavía mas la proporcionalidad. Entonces yo creo que tenemos que entrar en una cultura de pactos, eso es evidente, en España, cosa que no tenemos en el ámbito nacional, aunque sí existe en el ámbito regional y local. Favorecer esa cultura de pactos, y sobre todo yo creo que volver otra vez a adaptar nuestra política real a las nuevas condiciones sociológicas del país que son las que realmente han provocado esta situación.”