La base estadounidense de Camp Century fue instalada al noroeste de Groenlandia a finales de los años 50, en lo más “caliente” de la Guerra Fría.
PUBLICIDADLa base estadounidense de Camp Century fue instalada al noroeste de Groenlandia a finales de los años 50, en lo más “caliente” de la Guerra Fría.
Los documentales de la época la presentaban como la “ciudad bajo el hielo” construída con fines científicos.
Sin embargo la ciudad bajo el hielo animó a los militares estadounidenses a “soñar” con el secretisimo proyecto “Iceworm”, (gusano de hielo) una intrincada red de túneles para almacenar misiles balísticos a las puertas del enemigo de la época, la Unión Sovietica.
Los científicos comprobaron en solo unos años que el proyecto Iceworm era una quimera y que la inestabilidad del hielo nos les permitiría establecer un arsenal nuclear en el Polo Norte.
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Tampoco era viable establecer una base permanente.
Enterrada para… ¿Siempre?
En 1967 la base “Camp Century” fue abandonada. Los militares se llevaron el reactor nuclear que servía para generar la electridad pero dejaron numerosos residuos, aguas fecales, plásticos contaminantes y el equivalente en masa de 30 aviones Airbus A320 de residuos nucleares.
Los científicos habían elegido una zona precisa en la que —creían— la nieve no se derretía jamás. Los arquitectos confiaban en que la nieve y el hielo lo mantendrían todo enterrado “para siempre”.
Sin embargo “los tiempos han cambiado” como declaró a la agencia France Presse el glaciólogo William Colgan, y la base podría quedar expuesta a la superficie en el año 2090 segun el estudio que coordina.
“The abandoned ice sheet base at Camp Century, Greenland, in a warming climate” (La base abandaonada bajo el hielo de Camp Century, Groenlandia, en un clima cada vez más caliente), es el título de la investigación que alerta sobre las consecuencias se esta salida a la superficie publicado en su totalidad el pasado sábado.
En el trabajo publicado en la revista Geophysical Research Letters el equipo explica el contexto histórico de la creación de la base, hace un inventario de la estremecedora cantidad de residuos, calcula la velocidad la que va desapareciendo la capa de hielo en aquella zona y por ultimo se detiene en el contexto político actual, que dificulta la puesta en marcha de una solución antes de que sea demasiado tarde.
Una patata muy caliente
Las autoridades de Groenlandia (territorio autónomo pero con fuertes lazos con Dinamarca) se dicen preocupadas con las conclusiones del estudio y “determinadas e establecer las responsabilidades”.
El establecimiento de la base se enmarcaba en el “tratado de defensa de Groenlandia” firmado en 1951 entre Dinamarca y Estados Unidos. Sin embargo según las primeras declaraciones los daneses no conocían los detalles del “abandono de la base”.
Los investigadores concluyen que Camp Century supone un “motivo completamente nuevo de tensiones políticas resultantes del cambio climático”, debido a la multiplicación de este tipo de disputas que antes se creian perdidas para siempre en la criosfera.