La ofensiva de Mosul ya ha provocado la huida de más de 12.
La ofensiva de Mosul ya ha provocado la huida de más de 12.000 civiles de las zonas de combate. Dejan atrás la violencia, pero también el hambre y la barbarie. Antes de retirarse de las localidades asediadas, los yihadistas del Dáesh están matando a todas las personas que consideran peligrosas para sus intereses. A unos 25 kilómetros al sur de Mosul han sido encontrados los cadáveres de 51 hombres, ejecutados porque en el pasado fueron policías o miembros del Ejército iraquí.
En cambio, en algunas localidades como Al-Hud son los civiles los que se están rebelando contra los combatientes del grupo Estado Islámico. “Los civiles se sublevaron y asesinaron a 7 o 9 miembros del Dáesh. Después los del Dáesh volvieron con otros de otro pueblo y ejecutaron a 25 o 27 civiles de mi pueblo”, relata Sabry Abdullah, un vecido de Al-Hud.
La ofensiva aún no ha llegado al núcleo urbano de Mosul. Allí se calcula que hay entre tres mil y cinco mil yihadistas dispuestos a transformar los combates en una cruenta guerra de guerrillas en medio de una población de un millón y medio de personas.