Las imágenes de dron del sitio arqueológico de Nimrud, 30 kilómetros al sureste de la ciudad iraquí de Mosul, muestran el alcance del daño sufrido a manos del…
Las imágenes de dron del sitio arqueológico de Nimrud, 30 kilómetros al sureste de la ciudad iraquí de Mosul, muestran el alcance del daño sufrido a manos del Dáesh. Según las autoridades, el 70% del patrimonio cultural del lugar ha sido destruido. Durante décadas, los iraquíes que vivían en áreas cercanas han vigilado las históricas ruinas, arrasadas por los yihadistas en marzo de 2015.
“Con la caída del régimen de Sadam y la intervención de Estados Unidos, Irak se quedó sin gobierno, así que decidimos llamar a las comunidades tribales para proteger las reliquias y enviamos a gente para que establecieran puntos de control y patrullaran la zona”, dice Khaled Gabry, que vigila el lugar.
En los años 50 tuvo lugar una excavación a gran escala, en la que se desenterraron objetos tallados de marfil y piedra. La mayoría de ellos fueron almacenados en museos, pero algunos quedaron allí.
Según Gabry, las excavaciones continuaron hasta 2001.
“No sabemos exactamente cuántas reliquias culturales se llevaron los yihadistas, pero sabemos que se llevaron las más pequeñas y fáciles de contrabandear”, explica.
Cuando comenzó la guerra en Irak en 2003, las personas que vigilaban el sitio se fueron y Gabry organizó a un equipo de jóvenes para proteger las ruinas.
Tras la destrucción que dejó el Dáesh, los lugareños se unieron a las fuerzas gubernamentales, que retomaron Nimrud el pasado noviembre.