El fabricante japonés Takata se ha declarado culpable ante un tribunal de Detroit de defraudar a compañías de automóviles y a ciudadanos estadounidenses por instalar airbag defectuosos en más de 40 mi
El fabricante japonés Takata se ha declarado culpable ante un tribunal de Detroit de defraudar a compañías de automóviles y a ciudadanos estadounidenses por instalar airbag defectuosos en más de 40 millones de vehículos en Estados Unidos.
Takata llegó a un acuerdo en enero con el Departamento de Justicia y se comprometió a pagar unos 1.000 millones de dólares en multas e indemnizaciones. 850 millones de dólares irán a los fabricantes que usaron sus airbags y tuvieron que cambiarlos. Otros 125 millones se dedicarán a las víctimas de accidentes.