El candidato conservador a la Presidencia francesa, François Fillon, ha sido imputado por malversación de fondos públicos en relación con el caso de los supuestos empleos falsos atribuidos a su esposa
El candidato conservador a la Presidencia francesa, François Fillon, ha sido imputado por malversación de fondos públicos en relación con el caso de los supuestos empleos falsos atribuidos a su esposa e hijos.
Fillon también ha sido acusado por complicidad y receptación del uso indebido de bienes sociales y por faltar a las obligaciones de declaración de la Alta Autoridad para la transparencia de la vida pública.
El ex primer ministro, que compareció ante los jueces un día antes de lo previsto, se acogió a su derecho de no responder a las preguntas de los magistrados y en su lugar leyó una declaración que tenía preparada y en la que explicaba que no pedía ningún favor, solo que se respetase la ley.
Este martes también se ha sabido que Fillon recibió una parte del dinero que cobraron sus dos hijos, Marie y Charles, como asistentes parlamentarios.
El pasado mes de enero, el candidato a la presidencia francesa aseguraba en una entrevista que “solo había una cosa que podría impedirle ser candidato: que se pusiese en duda su honor, que fuese imputado”, dijo.
Según la prensa francesa, los jueces tienen en su dossier pruebas además de los testimonios de los dos hijos de Fillon sobre el dinero que éstos abonaron a su padre en diversos giros bancarios.
En su interrogatorio policial, su hija Marie, por ejemplo, justificó las transferencias realizadas a su padre como un reembolso de los gastos de su boda celebrada en 2006.