Irán es un país eminentemente joven.
PUBLICIDADIrán es un país eminentemente joven. Una cuarta parte de la población de cerca de 80 millones de personas, tiene entre 15 y 29 años.
Ya sean simpatizantes del candidato reformista, Hasan Rohani o del conservador Ebrahim Raisi, la juventud iraní parece apasionada por la política.
Reihaneh Taravati es fotógrafa. Su página de Instagram tiene cerca de 170.000 seguidores. Su nombre empezó a ser conocido tras ser arrestada junto con otros jóvenes por bailar una famosa canción (Happy, de Pharrel Williams), y subir las imágenes a Internet. Asegura que un tuit de Rohani en su apoyo ayudó a su liberación. Su breve detención no ha conseguido que renuncie a votar, ya que tiene grandes esperanzas de cambio. Reihaneh Taravati: “Los jóvenes creen que todos deben acudir a las urnas. En la franja de 16 a 26 años hay pocos que dicen que no votarán”.
Según cifras oficiales, 1,3 millones de jóvenes iraníes podrán votar por primera vez. Reihaneh cree que el interés de los jóvenes por la política obedece en parte a la irrupción de las nuevas tecnologías, que les mantienen al tanto de todo lo que sucede. Reihaneh Taravati: “Todos los jóvenes tienen teléfonos móviles y están familiarizados con las redes sociales. Manejan perfectamente internet independientemente de su clase social. Siguen a los famosos, controlan los “me gusta” y ven las noticias en sus teléfonos. Y los que no tienen móvil, cuando llegan a sus casas cogen los de sus padres. Son hijos de la tecnología”.
Bardia es amigo de Reihaneh. También participó en el controvertido vídeo que terminó en arresto. Actor y pintor, considera que acudir a las urnas puede tener influencia en sus campos de interés.
Bardia: “Si la política en un país va por buen camino, todos los pequeños y grandes acontecimientos que se llevan a cabo, también irán por el camino adecuado. Para mí, como persona que trabaja en el campo del arte, la cultura es muy importante. Durante este tiempo se ha prestado más atención a la cultura y creo que ha sido su política la que ha creado esa atmósfera”.
Los iraníes, especialmente los jóvenes, siguen con enorme interés los debates de los candidatos en radio y televisión . Cada uno de ellos, desencadena encendidas discusiones. Jafar es estudiante de farmacia en la Universidad de Teherán. Jafar: “Creo que la Universidad de Teherán, donde estudio, es uno de los sectores más políticos del entramado académico del país. Mis compañeros de clase saben muy bien que uno de los pilares de un país democrático son las elecciones. Para ellos, es lógico no privarse de esta oportunidad”.
El viernes, hay otras elecciones cruciales en el país: las locales. Shervin tiene sus propias razones para votar, menciona entre otras cosas la elevada tasa de inflación tras dos mandatos con las políticas económicas del expresidente Mahmoud Ahmadinejad.
Shervin: “Cuando la inflación severa disparó el precio del dólar, mis ahorros, cerca de 1000 dólares, se quedaron en 250, y por supuesto tuvo una repercusión directa en mi vida. Otra cuestión son las libertades sociales que pueden cambiar a medida que cambian los gobiernos y el problema del aislamiento internacional que nuestro país sufría durante años. El gobierno ha sido capaz de resolver este problema con el diálogo y llegar a un cierto respeto mutuo. Por esas mismas razones creo que es necesario participar en los comicios”.
Tras los dos mandatos de Ahmadinejad, las nuevas generaciones parecen decididas a no desaprovechar ninguna oportunidad de propiciar cambios políticos.