PUBLICIDADLas autoridades británicas han identificado ya 27 edificios potencialmente peligrosos que incumplen las normas de seguridad antiincendios. Hasta el momento han ordenado la evacuación de cuatro de estos bloques de viviendas, lo que significa que cerca de 700 personas han tenido que dejar su hogar.
Los responsables locales han enviado equipos de trabajadores sociales sobre el terreno para tranquilizar a los afectados. “En este momento lo más importante es informar a la gente y hacerlo de manera personalizada. Estamos aquí para tranquilizarles y para explicarles que hacemos esto por su seguridad. Y también para decirles que estamos haciendo todo lo necesario para que sus casas sean un lugar totalmente seguro cuando vuelvan a sus viviendas”, explicaba Georgia Gould, del ayuntamiento de Camden.
Pero unas ochenta personas se niegan a abandonar sus casas, a pesar de que las autoridades les han buscado un alojamiento alternativo que podrán utilizar hasta que finalicen los trabajos de rehabilitación. Se estima que las obras podrían durar entre dos y cuatro meses.
La mayoría de los edificios afectados fueron construídos en los años setenta. Pero sus problemas derivan principalmente de las reformas que se realizaron posteriormente y que implicaron la utilización de materiales de peor calidad. En general presentan defectos de revestimiento similares a los de la torre Grefell que ardió la semana pasada y que dejó 79 muertos.