PUBLICIDADPacto de impunidad para Rubert Mugabe. El expresidente de Zimbabue podrá quedarse en su país junto a su mujer, Grace, y gozará de inmunidad. Según fuentes próximas a las negociaciones, Mugabe lo habría puesto como condición para presentar su dimisión. Antes de conocerse la noticia, se rumoreaba incluso con su posible exilio a Singapur.
Pese a la catastrófica situación del país, muchos zimbabuenses reconocen la labor de Mugabe tras casi cuatro décadas en el poder, aunque otros le piden explicaciones.
"El presidente Mugabe ha dejado el poder, pero no queremos que le pase nada malo. Todos cometemos errores. Es un anciano. Debería descansar, pero no debería ser hostigado ni perjudicado de ninguna manera. Luchó por este país y por su liberación. Simplemente ha tenido malas influencias de su entorno, pero nosotros decimos que debe descansar", dice una zimbabuense.
"La gente necesita saber de él. Tal vez debería aparecer en televisión y disculparse ante la nación. Debería expresar algún tipo de remordimiento para que las personas encuentren justificación a todo lo que ha estado sucediendo en esta nación", señala otro zimbabuense.
Zimbabue tiene todas las esperanzas puestas en Emmerson Mnangagwa, el exvicepresidente depuesto que este viernes se convertirá en flamante jefe de Estado de forma provisional. Mnangagwa ha prometido una nueva democracia para el país.