Aumenta la tensión militar en la península de Crimea. Rusia traslada un segundo grupo de misiles S-400 tierra-aire al cabo de Fiolent, en las afueras de Sebastopol.
Estados Unidos informó en diciembre pasado que planeaban proporcionar a Ucrania ayuda militar que definió como* "capacidades defensivas mejoradas"*, lo que incluía misiles anticarro Javelin.
Ya sobre el terreno el comandante del Ejército ruso** Eugeni Markelov** explicaba: "Esta lanzadera de misiles S-400 nos permite localizar objetivos en un rango de hasta 600 kilómetros. Entonces, incluso antes de que los misiles alcanzaran la frontera de Crimea, los veríamos claramente".
Esta es la segunda división armada con sistemas de defensa aérea S-400 en la península anexionada por Rusia, después de la instalada en 2017 cerca de la ciudad portuaria de Feodosia.
El diputado por Sebastopol en la Duma Dimitri Belik justificaba el despliegue armamentistico: "Recientemente hemos visto amenazas más frecuentes contra nuestro territorio. Hemos visto un intento de ataque con drones contra nuestra base en Tartús en Siria. Por lo tanto, el despliegue del sistemas de misiles S-400 cubre todo el espacio aéreo de Crimea y lo hace invulnerable a drones, aviones o cualquier otra máquina voladora que planee por aquí".
Rusia se anexionó Crimea manu militari desde Ucrania en 2014. La Unión Europea y Estados Unidos aplicaron sanciones económicas y se mantiene un tenso enfrentamiento en la región.
En 2014 el ejército ruso tomó posesión de carros de combate ucranianos, material de guerra y del único submarino ucraniano en Sebastopol.