La Casa Blanca niega que Donald Trump haya tenido algo que ver en la dimisión de Andrew McCabe. El 'número 2' del FBI llevaba meses sometido a una enorme presión y críticas del presidente estadounidense.
PUBLICIDADEl 'número dos' del FBI, Andrew McCabe, llevaba meses en el punto de mira de Donald Trump, sometido a las presiones y a las críticas del presidente estadounidense y de los republicanos, hasta que al final ha tirado la toalla y optado por renunciar su puesto.
En teoría, McCabe seguirá en el FBI hasta su jubilación en marzo, pero, en la práctica, ya ha dejado el cargo. Desde la Casa Blanca aseguran que Trump no ha tenido nada que ver con esta decisión. "Puedo decirles que el presidente no tomó parte en este proceso de toma de decisiones. Le remito al FBI y a su director Christopher Wray, en el que (...) el presidente tiene plena confianza y en cuyas manos ha dejado las decisiones del FBI", ha asegurado la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders.
McCabe fue la mano derecha del exdirector del FBI James Comey, junto al que dirigió la investigación sobre la supuesta injerencia rusa en las elecciones de 2016. Comey fue despedido por Trump en mayo del año pasado.
Durante los últimos meses, el presidente había arremetido contra McCabe a través de Twitter. En concreto, le reprochaba las donaciones que había recibido su esposa, candidata demócrata al Senado en 2015, de una figura próxima a Hillary Clinton. Trump le llegó a acusar de recibir dinero de los "títeres" de Clinton.