Las delegaciones de ambos países han mantenido conversaciones y una comida en la residencia del jefe de Estado en Seúl
El deshielo intercoreano parecer ir más rápido de lo que se podía prever. Tras la participación de las delegaciones del norte y el sur en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Invierno, ambas han mantenido conversaciones y una comida en la residencia presidencial de Seúl. El siguiente capítulo ha sido la posibilidad de un encuentro conjunto en Pionyang.
El portavoz presidencial de Corea del Sur, Kim Eui-kyeom, ha explicado que la propuesta de Kim Jong-un refleja su voluntad de mejorar las relaciones tras invitar al presidente Moon Jae-in a visitar el norte. Esté último quiere que se creen "las condiciones adecuadas para que suceda".
No todo transcurre en el mismo tono conciliador. Centenares de ciudadanos surcoreanos han protestado contra el vecino del norte a pocos kilómetros de donde tenía lugar el encuentro y las fuerzas de seguridad han intervenido. De celebrarse la cumbre entre Seúl y Pionyang sería la tercera en la historia y la primera en más diez años. La de Kim Yo Jong, hermana del líder norcoreano, es la primera visita de un miembro de la dinastía Kim a Corea del Sur.