Colombia declara la guerra a los hipopótamos de Pablo Escobar

Colombia declara la guerra a los hipopótamos de Pablo Escobar
Por Marta Rodriguez Martinez
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Se trata del enésimo legado incómodo que el narcotraficante ha dejado en su país.

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A pesar de llevar un cuarto de siglo muerto, Colombia sigue luchando contra la herencia de Pablo Escobar, aunque no siempre tenga que ver con el tráfico de drogas, sino también con la protección de su ecosistema de la amenaza de una manada de hipopótamos salvajes.

Estos grandes mamíferos que habitan el África subsahariana llegaron a Colombia de la mano del narcotraficante Pablo Escobar.

La Hacienda Nápoles era otra de las excentricidades que conforman el personaje. Se trata de una majestuosa finca que Escobar pobló como si se tratara de su particular arca de Noé con animales procedentes de los cinco continentes, importados ilegalmente en Colombia.

Elefantes, jirafas, rinocerontes...Tras la caída del gran capo de la droga, el Estado expropió la hacienda y repartió la exótica fauna entre los zoológicos de Medellín y Bogotá. Todo, a excepción de los hipopótamos.

La gran invasión

"Eran cuatro", explica a Euronews David Echeverri López, biólogo de la Corporación Autónoma Regional de las cuencas de los ríos Negro y Nare (CORNARE), región afectada por la invasión de hipopótamos. Ahora, hay más de cuarenta.

Han traspasado las verjas de la Hacienda Nápoles y viven en libertad en el río Magdalena, dónde la población aumenta sin control. A diferencia de África, en Colombia no tienen depredadores naturales. "Están en una zona tranquila, dónde se están reproduciendo", precisa Echeverri.

Una batalla de años

"Es una especie invasora que está ocasionando problemas a los sistemas nativos", explica Echeverri. Su gran volumen -pesan de 1 a 3 toneladas- y su comportamiento territorial les convierte en un peligro para la población ribereña, especialmente para los pescadores.

La OMS clasifica al hipopótamo como uno de los animales más agresivos del mundo y el más mortífero en África para el ser humano, con una media de 50 muertes al año.

"No hemos tenido ataques confirmados, nos han llegado rumores, pero no han tenido evidencias", asegura Echeverri. "Llevamos varios años haciendo guerra al hipopótamos. Son muy impredecibles".

Un grupo de hipopótamos nadan en Puerto Triunfo, Colombia.
REUTERSS/Albeiro LoperaUn grupo de hipopótamos nadan en Puerto Triunfo, Colombia.

Una de las tareas de Echeverri es contar los especímenes para realizar un censo. "Me han perseguido en las labores de seguimiento...cuando sienten que les están siguiendo, arremeten".

A parte del control directo, llevan a cabo un monitoreo con cámaras de seguridad, por el que estiman que hay 33 ejemplares en el lago e indicios de unos 6 o 7 fuera.

En 2017, uno de estos hipopótamos saltó a la fama en las redes sociales al alcanzar el municipio de Puerto Triunfo y deambular por sus calles.

Hipopótamo colombiano busca zoo

A pesar de los sustos esporádicos y el riesgo que representa, sigue siendo un animal popular, según comenta Echeverri: "La gente quiere al hipopótamo. Lo ve muy llamativo, es un tema muy curioso. Nos llaman medios de todo el mundo interesados".

Sin embargo, no quiere que se olvide que para la gente de la zona es un problema serio: "se comen el pasto para las vacas, en los ríos se convierten en un riesgo, los servicios turísticos están varados..."

"Quisimos plantear la posibilidad de esterilizarlos, pero sale muy costoso. Lo hicimos con un individuo y nos costó 100 millones de pesos", indica. "Hemos hablado con expertos de África sobre el tema porque también contemplamos la posibilidad de liberarlos en ese continente, pero ellos dicen que es un riesgo porque pueden tener parásitos propios de nuestro ambiente, lo que podría ser un problema para el entorno de África".

Además, no disponen del presupuesto necesario para su conservación y, lo que tienen, prefieren destinarlo a las especies nativas como los felinos u osos. "Es triste invertir en una especie exótica", reconoce y, por tanto, insiste: ¿Qué zoo quiere dar cobijo a los hipopótamos asilvestrados de Pablo Escobar?

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