Rusia asegura que responderá "de manera proporcional" a las sanciones impuestas por la Administración Trump.
Mientras Moscú anuncia su propia lista negra de ciudadanos estadounidenses para responder a las sanciones de Washington por su supuesta intervención cibernética en las elecciones estadounidenses, los rusos de a pie aseguran no entender la reacción de la Administración Trump. Una acción que, como el envenenamiento del exespía Skripal, las autoridades rusas siempre han negado.
"Creo que es terrible, un país contra el otro. Tengo familia y amigos en Estados Unidos, yo misma voy muy a menudo allí, a la gente de allí le gustan los rusos y nuestro presidente es muy popular entre la gente normal allí. Cada vez que voy, escucho, "Oh, el señor Putin".
"Es un sinsentido. ¿Cómo podemos nosotros tener algo que ver con la elección de Donald Trump? Es solo política".
"Supongo que simplemente tenemos que esperar a líderes más sensatos. No llegaremos a nada con los actuales".
Las autoridades rusas advierten que Washington está jugando con fuego al minar las relaciones entre ambos países. Una crisis que tiene lugar a dos días de las elecciones presidenciales rusas.