El caso Skripal deriva en una crisis diplomática sin precedentes con más de 20 países involucrados.
El caso Skripal deriva en una crisis diplomática sin precedentes con más de 20 países involucrados.
El pulso entre Reino Unido y Rusia se internacionalizó cuando la primera ministra británica pidió expliciones a Moscú sobre el envenenamiento del ex espía. Ante la negativa rusa, May decidió expulsar a 23 diplomáticos rusos y logró arrancar un comunicado conjunto con Estados Unidos, Alemania y Francia para exigir respuestas.
Haciendo frente común con Londres, Estados Unidos, anunció el lunes la expulsión de 60 funcionarios del legaciones rusas, seguido por un grupo de países de la Unión Europea, que va en aumento a medida que pasan las horas. A Francia, Polonia, Alemania y Canadá, que expulsaron 4 diplomáticos cada uno, se sumaron la República Checa (3), Lituania (3), Dinamarca (2), Italia (2), Holanda (2), España (2) Finlandia (1), Hungría (1) Rumanía (1), Letonia (1), Estonia (1), Croacia (1) y Suecia (1).
Ucrania, anunció la salida de 13, y Australia, expulsará a dos más.
La OTAN por su parte expulsó a 7. El espectro de la Guerra fría vestá cada vez más presente, según este abogado constitucionalista:
Bruce Fein, abogado constitucionalista: "Bueno, creo que nos encaminamos a unas relaciones como las que había en la Guerra Fría, es como volver a la crisis de los misiles cubanos, con relaciones de confrontación. No veo hoy por hoy, ningún lugar en el mundo, incluida Siria, incluido Irán, donde Estados Unidos y Rusia vayan a estar en la misma línea".
Moscú sigue negando toda implicación en el envenenamiento de Skripal y su hija y atribuye el ataque a fuerzas poderosas en Estados Unidos y el Reino Unido.
En lo que todas las partes están de acuerdo es en que el caso va camino de convertirse en la crisis más seria entre Rusia y Occidente desde la anexión de Crimea.