La Mesa del Parlament acepta la delegación del voto de Carles Puigdemont pese a la advertencia de los letrados de la Cámara y la prohibición del Tribunal Constitucional
PUBLICIDADJunts per Catalunya y Esquerra Republicana siguen buscando fórmulas para sumar los votos necesarios que les permitan investir a un candidato independentista sin el concurso de los radicales de la Candidatura d'Unitat Popular (CUP).
Para ello la Mesa de la Cámara catalana ha aceptado la delegación del voto de Carles Puigdemont. Todo pese a la advertencia de los letrados del Parlament y la prohibición expresa del Tribunal Constitucional.
La oposición parlamentaria ha pedido a la Mesa una rectificación.
Entre los diputados que están en prisión o en el extranjero para eludir la acción de la justicia, los independentistas todavía necesitarían un voto más para asegurarse la mayoría.
El bloqueo político continúa.