El anuncio del régimen norcoreano de suspender sus ensayos atómicos y de misiles, así como el cierre de su centro de pruebas nucleares ha sido acogido con mucha prudencia entre sus vecinos de Corea del Sur
PUBLICIDADMucha desconfianza pero también cierta esperanza. El anuncio del régimen norcoreano de suspender sus ensayos atómicos y de misiles, así como el cierre de su centro de pruebas nucleares ha sido acogido con mucha prudencia entre sus vecinos de Corea del Sur.
"Es una simple declaración. Si no cambia su sistema dictatorial, no creo que podamos confiar en Corea del Norte porque no es un país normal. No creo que podamos establecer relaciones diplomáticas normales ni garantizar nuestra seguridad ", declara este surcoreano.
Muchos consideran que el comunicado de Pionyang no es sincero pero hay quienes ven una oportunidad única para limar asperezas.
"No confío en la declaración de Corea del Norte sobre la suspensión de pruebas nucleares y el cierre del centro de pruebas nucleares. Actúan de manera hipócrita y creo que lo hacen para evitar más problemas derivados de la presión internacional y las correspondientes sanciones", afirma otro surcoreano.
"Tengo mucha esperanza. Creo que esta decisión se ha convertido en una oportunidad para mejorar la relación entre Corea del Sur y Corea del Norte", señala este último ciudadano.
El próximo viernes los mandatarios de las dos Coreas protagonizarán un esperado encuentro que podría marcar el camino hacia la desnuclearización y a una paz duradera" en la zona.