Mattarella ha acabado por dar su bendición al Gobierno de los antisistema de Cinco Estrellas y la ultraderechista Liga. Paolo Conte será primer ministro, flanqueado por los vicepresidentes Di Maio y Salvini.
Por fin, después de tres meses de tensión, transacciones políticas y crisis institucional, Italia tiene Gobierno. Un Gobierno, hijo de la alianza entre el Movimiento antisistema 5 Estrellas y la ultraderechista Liga Norte, bajo la dirección de Paolo Conte, un jurista completamente novicio en política. El presidente Mattarella, que impuso su veto al anterior ejecutivo euroescéptico, ha aceptado este con cierto alivio, pues al menos permite sacar al país del trance.
Conte gobernará, pero flanqueado por los dos pesos pesados de Cinco Estrellas y la Liga, Luigi di Maio y Matteo Salvini, que serán vicepresidentes. Di Maio se hará cargo asimismo de la cartera de Desarrollo Económico, Trabajo y Políticas Sociales, y Salvini, de Interior, con la prioridad, según él mismo señaló, de "mandar a casa" a los inmigrantes.
El viejo economista euroescéptico Paolo Savona, al que Mattarella impuso su veto como ministro de Economía, va a ser en el nuevo Gobierno, paradójicamente, ministro de Asuntos Europeos.
Economía quedará a cargo de Giovanni Tria, próximo de la Liga y de su objetivo de bajar impuestos y poner fin a los recortes, pero favorable a que Italia siga en el euro. Los 18 ministros, 9 de Cinco Estrellas y 6 de la Liga, jurarán este viernes el cargo.