El presidente de Francia, Emmanuel Macron, denunció este martes el "cinismo" y la "irresponsabilidad" del Gobierno de Italia en la gestión del barco "Aquarius"
PUBLICIDADEl presidente de Francia, Emmanuel Macron, denunció este martes el "cinismo" y la "irresponsabilidad" del Gobierno de Italia en la gestión del barco "Aquarius" y expresó su intención de hablar con las autoridades italianas, españolas y maltesas sobre la crisis europea abierta por el rechazo a los inmigrantes del barco.
En la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, el portavoz del Gobierno francés, Benjamin Griveaux, criticó "una forma de cinismo y una parte de irresponsabilidad" en la manera en que Italia ha gestionado esta situación.
A la pregunta de por qué Francia no se había propuesto para acoger el navío con 629 inmigrantes, el portavoz dijo que "está descartado crear un antecedente" y señaló que se debería haber aplicado el derecho internacional, que estipula que el puerto de acogida debe ser el más cercano al lugar del rescate.
En virtud de esas reglas, dijo que "si un barco tuviera a Francia como la costa más próxima", podría desembarcar allí.
En cualquier caso, el portavoz saludó la decisión de España de acoger el "Aquarius" en Valencia y recalcó: "Debemos mostrar solidaridad, algo que no ha hecho el Gobierno italiano".
Aseguró que "Francia asume su parte en la gestión de este fenómeno migratorio que se ha disparado en los cinco-seis últimos años" y recordó que el pasado año el país dio asilo a 32.000 personas y que podría acoger a algunos inmigrantes del "Aquarius".
Se evaluará caso por caso quiénes se podrían beneficiar del estatuto de asilo y se examinará la situación con España "y el resto de países".
El resto de inmigrantes deberían ser enviados a sus países de origen porque "es la línea de humanidad y firmeza que nos hemos fijado desde el principio", añadió.
Drama humanitario
El portavoz del Gobierno indicó que Macron había hablado de este tema con la Comisión Europea y que hoy lo hará con dirigentes de Italia, España y Malta. Aunque no especificó con quién, se entiende que será con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y con los primeros ministros de Italia, Giuseppe Conte, y Malta, Joseph Muscat.
Macron había sido este lunes blanco de críticas de la oposición e incluso de su propio partido por la falta de respuesta frente a la situación del "Aquarius".
"Francia no puede quedarse en silencio ante el drama humanitario que se registra en el Mediterráneo", le declararon en una carta Guillaume Gouffier-Cha y Fiona Lazaar, diputados de La República en Marcha, el partido gubernamental.
"La España de Sánchez es el honor de Europa", señaló en Twitter el primer secretario socialista, Olivier Faure.
En la Asamblea Nacional, los diputados comunistas se sumaron a las críticas subrayando "la indignación y la cólera" de su grupo ante el "silencio extremadamente culpable" del Gobierno francés y el hecho de que la Unión Europea deje el trabajo en manos de una ONG.
Por el contrario, la líder del partido ultraderechista Agrupación Nacional, Marine Le Pen, vio a esas ONG como cómplices de las mafias de traficantes de seres humanos, y advirtió de que aceptar el desembarco de sus navíos crea un efecto llamada "irresponsable".