El tutular de Interior ha endurecido su p`olítica migratoria con vistas a evitar el avance de la ultraderecha en Bavaria en las próximas elecciones de octubre
Es una batalla que se juega en una segunda línea política desde hace décadas pero que ahora amenaza la estabilidad de Alemania. El ministro de Interior, Horst Seehofer, protagoniza un enfrentamiento abierto con Angela Merkel. El plan del miembro de la CSU, socio bávaro de la canciller, es acelerar las peticiones de asilo e incrementar las deportaciones a los países a los que llegan los inmigrantes.
"Creo que definitivamente hay alguna división dentro de la CSU, el partido de Seehofer, sobre el camino que deben de tomar. Y creo que tiene mucho apoyo para seguir su línea dura, pero cuando se acercó la fecha límite de ayer y realmente empezó a afectar a gente en la CSU por lo que estaba pasando, pienso que han querido que se tome un poco más de tiempo, que lo piense, que vuelva el lunes, que se siente con Merkel y que vea si pueden llegar a algún tipo de compromiso", explica Matthew Karnitschnig, redactor jefe de Politico en Europa
La disputa se enmarca dentro de la celebración las próximas elecciones de octubre en Baviera, donde la CSU no quiere poner en riesgo su hegemonía allanando el camino a la ultraderecha de Alternativa por Alemania. Seehofer ya ha propuesto crear un eje europeo contra la inmigración junto a Austria e Italia, dos de los socios con posturas más duras en esta materia.