Dura ocho días y es a prueba de thinner, acetona, cloro, aguarrás y disolventes. Estamos hablando de la tinta que utilizaron millones de votantes mexicanos para emitir su sufragio este primero de julio, durante unas elecciones marcadas por la violencia y las ganas de cambio.
PUBLICIDADDura ocho días y es a prueba de acetona, cloro, aguarrás, disolventes y fraude electoral. Así es la tinta con la que se marcaron a millones de votantes mexicanos tras emitir su sufragio este domingo, durante unas elecciones dominadas por la violencia y las ganas de cambio.
Con el objetivo de garantizar el voto y fortalecer la democracia, Filiberto Vázquez, químico y catedrático del Instituto Politécnico Nacional (IPN), creó un pigmento imposible de borrar. Su composición se adhiere al núcleo de las células, por lo que solo se quita cuando la piel se regenera. Esto impide que personas malintencionadas, puedan votar más de una vez.
A Vázquez solo le tomo medio día para encontrar la fórmula que le valió un reconocimiento a nivel internacional. El pigmento ya fue vendido a muchos países y se ha utilizado en lugares como Nicaragua, Honduras, República Dominicana, El Salvador y Guatemala.
Para las elecciones de este primero de julio, se produjeron 314.532 aplicadores del pigmento a cargo del IPN.
La idea de crear esta tinta existe desde 1993, cuando el Instituto Federal Electoral (IFE), organismo responsable de organizar las elecciones federales en México en ese entonces, lanzó una convocatoria para inventar una tinta indeleble. De todas las empresas nacionales y extranjeras que participaron, la fórmula de Vázquez fue la ganadora.
Con los años el pigmento ha cambiado de aspecto. A partir del año 2006 se utiliza con un aplicador, puesto que antes contaba con un envase roll on.