Los animalistas exigen unas fiestas sin sangre que eliminen las corridas de toros, como el propio alcalde se ha mostrado favorable a hacer
PUBLICIDADVestidas de negro y con el típico pañuelo rojo de las fiestas de San Fermín, se han manifestado un centenar de personas frente al Ayuntamiento de Pamplona exigiendo unas fiestas sin sangre. Quieren acabar con las corridas de toros en vísperas de la semana grande navarra. Se han acompañado de bengalas de humo rojo y caretas de toro para simular una manada que irrumpe en el Ayuntamiento y simbolizar el derramamiento de sangre que se produce en las plazas de toros.
"Todos los toros que corren por la mañana los encierros son conducidos directamente por la tarde a las plazas de toros donde serán torturados hasta la muerte. Eso es algo que la mayoría de la gente desconoce y ahí es donde radica el mayor maltrato animal y el más cruento de este tipo de espectáculo". Para Aïda Gascón, directora de AnimaNaturalis, el objetivo de la protesta es abrir el debate y que se escuche a esa mayoría silenciosa que preferiría invertir los recursos públicos en eventos sin riesgos, violencia ni agresión.
Los defensores animalistas se muestran esperanzados después de que el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, afirmara que no podía imaginar unos Sanfermines sin toros, pero sí unos Sanfermines sin corridas. Creen que es una muestra de que algo está cambiando en la sociedad y en el Ayunamiento.