La comunidad drusa encabeza una multitudinaria manifestación para pedir igualdad entre la población del país
La nueva ley de Estado Nación israelí fractura la sociedad. Unas 90,000 personas han protestado contra la norma en Tel Aviv. La manifestación ha estado encabezada por drusos, muchos de cuyos miembros, al contrario que los de la población árabe o cristiana, han estado en el Ejército, como Amal Assad, general druso en la reserva: "Reunimos aquí a todos los ciudadanos israelíes para cambiar una mala ley para el país, para el estado de Israel, para el pueblo judío y para todas las minorías. Todos somos iguales, judíos, árabes, drusos, todos. Somos hermanos, defendemos este país y lo construiremos y seguiremos viviendo aquí juntos"
Las concentraciones se han repetido en otras localidades árabes de Israel. La ley aprobada el pasado 19 de julio reserva a los judíos el derecho a la autodeterminación y saca al árabe de las lenguas oficiales del país. La normativa fue criticada por diversos sectores como grupos de izquierda, el mundo académico y de las artes o el propio presidente del país, Reuvén Rivlin.