Imelda Marcos, viuda del expresidente filipino Ferdinand Marcos, ha quedado en libertad tras pagar una fianza de unos 2.500 euros. Imelda, de 89 años, fue condenada la semana pasada por corrupción.
PUBLICIDADImelda Marcos, viuda del expresidente filipino, quedó este viernes en libertad bajo fianza tras pagar los 150.000 pesos (2.850 dólares o 2.511 euros) que el Tribunal Anticorrupción de Filipinas (Sandiganbayan) le impuso.
Imelda, de 89 años, acudió a la quinta división de este tribunal situado en Quezon City acompañada por sus hijos Imee (1955), Ferdinand (1957) e Irene (1960) y varios nietos, informó la cadena de televisión GMA.
La llamada "Mariposa de hierro", el apodo que recibió cuando gobernaba junto a su esposo, depositó la fianza fijada y se liberó de la custodia judicial a la que estaba sometida desde su condena del 9 de noviembre, según la orden judicial emitida por el juez Rafael R. Lagos.
Declarada culpable de siete delitos de corrupción
Imelda, diputada por Ilocos del Norte, la provincia de la familia de su marido, fue hallada culpable el viernes pasado de siete delitos de corrupción por los que recibió una pena de entre seis y once años de cárcel por cada uno de ellos.
El juicio se refería a 200 millones de dólares que en siete transferencias pasaron del erario público a cuentas privadas de la condenada en Suiza cuando fue gobernadora de Manila (1975-86).
La sentencia de Anticorrupción no es firme y puede recurrirse ante el Supremo, lo que permite a Imelda conservar su escaño parlamentario y mantener la campaña para gobernadora de Ilocos del Norte en las elecciones del próximo mayo, cargo que ocupa actualmente su hija Imee y que abandona para aspirar a un asiento en el Senado.
La dictadura de los Marcos, una historia de dinero robado y revuelta popular pacífica
Ferdinand Marcos e Imelda gobernaron Filipinas desde 1965 hasta 1986, periodo en el que recurrieron a la ley marcial entre 1972 y 1981.
Una revuelta popular pacífica acabó con la también llamada dictadura de los Marcos, quienes partieron al exilio el 26 de febrero de 1986.
Ferdinand murió en Hawai (Estados Unidos) en 1989 y su viuda e hijos regresaron a Filipinas unos años más tarde, donde les esperaban cientos de procesos judiciales, pero ninguno les ha llevado a la cárcel o arruinado.
La Comisión Presidencial de Buen Gobierno, creada para recuperar el dinero "robado" por los Marcos, calcula que la familia acumuló ilícitamente entre 5.000 y 10.000 millones de dólares el tiempo que gobernaron el país. EFE
