El presidente ruso Vladímir Putin muestra una satisfacción contenida mientras que la decisión de Donald Trump preocupa a kurdos e isrealíes.
PUBLICIDADHa sido otra de las decisiones de Donald Trump que ha alterado a la comunidad internacional. El presidente de Estados Unidos anunció por Twitter este miércoles la retirada de las tropas de Siria, sorprendiendo incluso al Ejército y a su propio gabinete, y como consecuencia "de la derrota del Daesh". En total 2.000 soldados permanecen en el país árabe.
La decisión ha sido bien recibida por el presidente ruso Vladímir Putin, aunque ha expresado dudas de que se convierta en una realidad: "En cuanto a la retirada de las tropas estadounidenses, no sé qué es. Los Estados Unidos tienen presencia en Afganistán desde hace 17 años y dicen cada año que están retirando sus tropas. Pero todavía permanecen allí".
La ministra francesa de Defensa ha indicado que el Daesh está más debilitado en Siria. No obstante, los 1.000 soldados galos mantendrán allí sus posiciones ya que, según Florence Parly, la derrota no es todavía definitiva: "La lucha contra el terrorismo no ha terminado. Ha habido muchos progresos, es cierto que hemos tenido progresos en Siria con la coalición. Pero esta lucha continúa y la seguiremos llevando a cabo".
Preocupación en Israel, donde se considera que la retirada de Estados Unidos supone una pérdida de equilibrios con Rusia y sobre todo con Irán. "Seguiremos actuando en Siria para impedir que rán se atrinchere militarmente contra nosotros. No vamos a reducir nuestros esfuerzos, vamos a aumentarlos", ha indicado el primer ministro Benjamín Netanyahu.
Los kurdos han mostado con manifestaciones su indignación por la decisión de Trump. Aliados fundamentales de Estados Unidos para avanzar sobre el autodenominado Estado Islámico, consideran que si el presidente estadounidense sigue adelante con la medida, menospreciará a aquellos que murieron luchando en Siria.