Los principales sindicatos italianos salieron este sábado a la calle en Roma para protestar contra las políticas económicas del Gobierno y pedir medidas más sociales. Fue una manifestación inédita desde hace seis años que reunió a miles de personas en la capital transalpina
PUBLICIDADTodos juntos en pos de mejoras para los ciudadanos. Los principales sindicatos italianos salieron este sábado a la calle en Roma para protestar contra las políticas económicas del Gobierno y pedir medidas más sociales. Fue una manifestación unitaria inédita desde hace seis años que, bajo el lema "Futuro para el trabajo", reunió a miles de personas en la capital transalpina.
"Muchos de los sacrificios que hemos hecho en estos últimos tiempos corren el riesgo de no servir para nada. Todavía estamos a tiempo. El Gobierno debe detenerse, llamar a los interlocutores sociales, invertir el curso negativo que sigue nuestro país y mirar hacia el futuro; hacia el futuro del trabajo", declaraba Annamaria Furlan, secretaria general del CISL.
La calle fue un clamor contra el desempleo.
"Nuestro país corre el riesgo de dar un paso atrás. Es muy preocupante que hayamos tenido dos trimestres seguidos con signos negativos. El bienestar no es suficiente. Tenemos que volver a situar el empleo en el centro. El mensaje es exactamente este: en primer lugar el empleo, como prioridad absoluta", señalaba Roberto Speranza, diputado del MPD.
La masiva manifestación deparó momentos curiosos en Roma, como la presencia de empresarios junto con representantes políticos de izquierda. Los sindicatos han planteado propuestas concretas sobre crecimiento, desarrollo, trabajo, pensiones e impuestos para tratar de corregir la crisis económica en Italia.