Castigo de los electores tanto a conservadores como a laboristas en las elecciones municipales en Inglaterra e Irlanda del Norte. La frustración del Brexit favorece a los liberaldemócratas y a los independientes.
PUBLICIDADCastigo sin paliativos tanto a los conservadores como a los laboristas en las elecciones locales celebradas el jueves en Inglaterra e Irlanda del Norte.
La pesadilla del Brexit ha llevado a la frustración a muchos británicos que han decidido dar la espalda a la primera ministra, Theresa May.
Según los datos del escrutinio, los conservadores pierden al menos 14 ayuntamientos y 400 concejales. También los laboristas, liderados por Jeremy Corbyn, sufren. Dos ayuntamientos menos y unos 79 concejales.
Ganan los liberaldemócratas y los independientes, ambos favorables a un nuevo referéndum sobre el Brexit, que irrumpen con fuerza en muchos municipios.
"Cuando lleguen las europeas, en un par de semanas, podríamos ver cómo ambos partidos desparecen del mapa en muchas zonas, especialmente los conservadores, porque el Partido del Brexit no ha tenido implicación alguna en estos comicios. Solo los pequeños partidos, la mayoría favorables a la permanencia, a los que la gente ha votado para mostrar su descontento con los dos grandes partidos", ha explicado en declaraciones a euronews, Tom Swarbrick, exasesor de Theresa May.
Estos resultados no hacen presagiar nada bueno, ni para conservadores ni para laboristas en las elecciones europeas, previstas en el Reino Unido el 23 de mayo, siempre que no se cierre antes un acuerdo sobre el Brexit.
No hay que olvidar que en las europeas habría más formaciones en liza. El Partido del Brexit, del eurófobo Nigel Farage, y el partido Change UK (Cambia el Reino Unido-Grupo Independiente) que integran antiguos conservadores y laboristas, partidarios de continuar en la Unión Europea.
<iframe src="https://wb.messengerpeople.com/?widget_hash=8374e3384159bc66f5b50cdc179e5f80&lang=en&wn=0" width="100%" height="300px" style="border:0;"></iframe>