Los espías tendrían objetivos muy detereminados como periodistas o defensores de los derechos humanos
PUBLICIDADWhatsapp responde a un caso de espionaje informático. La aplicación, con 1.500 millones de usuarios de todo el mundo, ha pedido a estos que instalen la última versión después de que se detectara al acceso de hackers al servicio de mensajeria instantánea propiedad de Facebook que se lograba mediante la función de llamada telefónica. Una actividad que afectaría únicamente a personas muy determinadas.
"No sabemos quiénes son los objetivos, aunque el software espía ha sido encontrado en los teléfonos de abogados de derechos humanos y periodistas. Cada cual puede sacar su propia conclusión sobre quién querría apuntar a esas personas. El problema es que una vez se generan esas vulneraciones para la seguridad, están ahí y es muy difícil controlar quién accede a ellas", explica Jennifer Baker, periodista de brusselsgeek.com
Según el diario Financial Times, una empresa israelí de seguridad, Grupo NSO, está detrás del diseño del programa de espionaje. Amnistia Internacional y otras organizaciones de derechos humanos han pedido al Gobierno de Tel Aviv que cancele las exportaciones de esta corporación.
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